Propoléate

El propóleo  es una sustancia que obtienen las abejas de las yemas de los árboles y que luego procesan en la colmena, convirtiéndola en un potente antibiótico con el que cubren las paredes de la colmena, con el fin de combatir las bacterias, virus y hongos que puedan afectarla.
Los egipcios usaban el propóleo (própolis) como uno de los ingredientes para la conservación de las vísceras de los faraones.

En el siglo XX, la utilización de propóleos fue masiva en dos importantes contiendas bélicas. En la Guerra de los Boers (1899-1902), en África del Sur, y en la Revolución Rusa.  En ambos casos, se aplicaba un ungüento a base de propóleos y vaselina sobre las heridas no sólo con un fin antiséptico, sino también cicatrizante y regeneradora de los tejidos.
Su utilización en seres humanos debe hacerse con reserva (sobre todo en caso de intolerancia o alergia a alguno de los productos de las abejas o a las mismas abejas) Históricamente se lo ha utilizado para tratar catarros de las vías respiratorias altas, resfriado común, gripe de cualquier virus y cepa, sinusitis, otitis, laringitis, bronquitis, asma bronquial, neumonía crónica, tuberculosis pulmonar. También se la utiliza en dermatología para el tratamiento de abscesos, forúnculos, sabañones, grietas, verrugas, infección en la raíz de las uñas, entre otros daños de la piel. Es también eficaz en otros problemas como conjuntivitis, infecciones y llagas bucales,
Recientemente, se han efectuado estudios, especialmente en China, donde se ha podido detectar la eficacia que tiene el propóleos en el tratamiento de la hipertensión, la arteriosclerosis y las afecciones cardiacas.
Algunas personas son alérgicas al propóleo.  Debido a ello, se debe actuar con precaución a la hora de consumirlo como alimento y al usarlo de forma externa por primera vez, se debe probar en una pequeña zona de la piel para observar si, después de un tiempo, produce alguna urticaria o hinchazón.
En defintiva el propóleo se utiliza para reforzar el sistema inmunológico, para prevenirlo de invasiones bacterianas que puedan causar enfermedades, desconozco  cual puede ser el beneficio que podemos obtener de esta sustancia para andar en bici, como no sea otra que la de evitar resfriados y catarros.
La épocas adecuadas para tomarlo son el Otoño y la Primavera( los alérgicos deben de evitarlo en está época)

El propóleo presenta una consistencia variable, dependiendo de su origen y de la temperatura. Hasta los 15°C es duro y se torna mas maleable a medida que aumenta la temperatura. Su punto de fusión varía entre 60 a 70 °C, llegando en algunos casos hasta 100°C. Su color también es variable, de amarillo claro a marrón oscuro, pasando por una gran cantidad de tonos castaña. Dependiendo del origen vegetal puede presentar color pardo a negro. Su olor también es muy variable, generalmente es agradable, y en algunos casos recuerda a su origen vegetal, mientras que en otros casos posee olor predominante a cera.
El propóleo puede ser comercializado como extracto o utilizado en formulaciones de cosméticos y productos farmacéuticos
No resulta fácil conseguir propóleos puro. Lo más frecuente es encontrar extractos en forma de pomadas, tinturas, ampollas y píldoras.  En todo caso, se debe adquirir aquéllos que tengan un porcentaje de contenido mayor del 20%.





Se conserva en recipientes de vidrio, nunca de plástico, lejos del aire y de la luz.
Se puede encontrar en gotas y en cápsulas, si lo tomamos para prevenir basta con una cucharadita o una cápsula en ayunas, si lo que queremos es tratar una afección respiratoria la misma dosis pero antes de cada comida.
No se Tori y Gelín si os habrá servido de mucho por lo que me habéis preguntado, ahora hay una cosa clara esto no da positivo.
Un saludo