Aquí van una cuantas curiosidades sobre nuestra aventura en el soplao.
El viaje.
Yo fuí en el coche con Beatriz,Mónica y Matín, fue montarme en el coche y empezar a sonar el móvil,era Mento que ya empezaba a hacer amigos por Cantabria y estaba amenazando a los organizadores porque le pedían la licencia para darle el dorsal y no la tenía,pero eso solo era imprescindible para los federados, porque la inscripción era mas barata para ellos.
Unquera
Era un pecado mortal pasar por allí y no degustar sus productos,nos pusieron media docena de corbatas que duraron un suspiro y no fuí yo el que mas comió
La cena
Aquí tuvimos algún problema debido a los biorritmos de cada uno,Mento todavía se rige por el horario infantil y a las nueve quería cenar, pero claro luego estaban los biorritmos de los Piti Germán y Pedro que van como van, así que unos cenamos primero y otros después.
La noche de la víspera
Fue una noche intranquila por parte de casi todos, creo que los únicos que se consiguieron relajar un poco fueron Beatriz y Martín, no se cual fué su método pero hacia las 5 de la mañana salían de su habitación unos ruidos como de pelicula....de pelicula de esas hombre, que no os lo voy a tener que explicar todo.
La salida
Después de desayunar, mas bien regular, nos tomamos la salida como si todos los demás participantes tuvieran que esperarnos, así nos fue ,que llegamos con la furgoneta y oímos el chupinazo de la salida,pero tampoco fue este motivo para estresarnos ,así da gusto.
El barro
Lo del barro fue un jarro de agua fría porque viendo aquel panorama nada mas empezar, se le quitaban las ganas a uno de todo,teníamos problemas para mantenernos en pie como para ir montados,Piti llevaba playeros y parecía que estaba haciendo patinaje artístico.Al acabar este barrizal había un abrevadero de ganado que nos sirvió para limpiar un poco la bici con los bidones, lo que no nos dimos cuenta que dicho abrevadero no era apto casi ni para las vacas,por lo que el bidón debería de haberse esterilizado antes de volver a utilizarlo, por supuesto no lo hicimos(el esterilizarlo) esta debió de ser la razón por la que los días siguientes anduvimos bastante sueltos del estómago.
La manguera
Después de otro barrizal, este de color rojo,en la bajada del Soplao, unos señores nos dejaron las mangueras para lavar un poco la bici, lo que pasa que me emocioné tanto que mientras yo lavaba la bici con mucho esmero se iba formando cerca de mí una cola ,que ni la del paro, hasta que uno me dijo "oye que no hace falta que le saques brillo" en esto perdí la concentración y le pase la manguera a otro
El rio
Esto si que era un trampa porque nos desviaron a todos para que nos metiésemos en el río, pusieron palés para no mojarnos, pero curiosamente faltaban el primero y el último, osea que nos mojamos.
Era curioso ver ,porque ir no se oía nada, como la gente subía super concentrada sin mediar palabra con nadie, solo se oía cuando pasabas cerca de alguien,fuuu,fuuu,fuuuu.
El IVA
Estos de Cabezón tienen mucho sentido del humor y como veis en las rampas mas duras de toda la ruta colocaron el cartelito, y así durante 3 km.
La ONU
Subiendo no se que puerto empecé a escuchar lenguas que yo no entendía, al principio pensé que era el mal de altura que me estaba enagenando el cerebro, pero en un momento de lucidez, descubrí que eran vascos y gallegos que me habián confundido con un compañero suyo perdido por esos montes,el gallego me decía "a dereita, adereita" no se si era porque era del PP o porque quería que nos pusiésemos a la derecha, el vasco decía "ornitinionak zubalacarrea" que en una traducción libre(de mi cosecha)creo que quiere decir "no puedo con los co...."
La gimnasia
Subiendo la cruz de fuentes encontraba gente por las cunetas haciendo estiramientos y descansando, como no me podía aguantar le dije a uno "jo macho estas sobrado, ya que te paras a hacer gimnasia y todo" creo que me contestó "grummmm" o algo así
Los GPS
No me refiero a los aparatos esos que te dicen la posición ,sino a aquellos individuos autóctonos que conocían la ruta mejor que a su propia familia,en una de la subidas uno iba diciéndoles a los demás donde estaba colocada cada piedra en el camino.
La niebla
Bajando el último puerto había una niebla que no se veía ni para cantar,me encontré con un madrileño que bajaba cuadrado y me dice tira tu delante que lo conoces mejor,si como si yo fuese cada fín de semana a hacer esa bajada,yo sé que al principio me siguió,luego ya no supe nada de él, pero las noticias fueron que nadie se perdió.
El teléfono
Estaba ya apretando a tope para llegar a la meta cuando suena el teléfono, fue cuando me dije"el que llama lo tiene claro, como si me llama San Pedro",luego descubrí que era Martín que estaba en la meta esperándome disfrutando de una cerveza y de algo de pasta
La sorpresa
Cuando me encontré con los repechinos,me dijeron que tenía una sorpresa en la habitación del hotel,lo primero que pensé fue "a que no nos hicieron la cama" pero no no era esa la sorpresa,intenté sonsacarles pero no soltaron ni prenda.Cuando llegué al hotel encima de la cama había una botella de cava, una caja de bombones y una funda para salva sea la parte,todo acompañado de una nota que paso a transcribir literalmente:"La dirección del hotel se complace en tenerles como huéspedes y les desea una feliz estancia aprovechando la ocasión par darles la enhorabuena por su enlace bla bla bla...."
Esto estaba dedicado a Oscarin y a mí y fue como venganza por parte del Capo de los F.V. por unas fotos subidas de tono que publiqué en el blog y que podéis volver a ver en Cincuentenario
Pedro y la nandrolona
En la cena del sábado Pedro nos contó que tiene una amiga farmaceutica y que le contó lo que íbamos a realizar en el Soplao ,para lo cual le pidió que si le podía conseguir un litro de Nadrolona, a los pocos días Pedro recibe la llamada de su amiga y le dice"pero Pedro si la nadrolona hay que suministrar 10ml. por vía intramuscular cada 15 0 20 días y tu me pides un litro, os vais a matar".
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