Prólogo de los Monegros

Hoy solo voy a contar una pequeña introducción de lo que iré narrando en posteriores entradas.

Diría que para llegar allí(Sariñena) casi llegamos a París gracias a las indicaciones de Martín y a la pericia conductora de Oscar(según él conoce atajos que ni los propios lugareños saben).

El hotel lo mejor,las noches con ronquidos,el ambiente nocturno impresionante(todo el pueblo Grañén para nosotros),la marcha ciclista monótona, polvorienta,y un poco mal organizada(comparado con otras a las que he ido),el regreso mas de lo mismo,gran madrugón porque alguno quería ver la película de terror que daban en el molinón hacia las cinco de la tarde(Oscar llegó después del intermedio),hubiésemos llegado puntuales si no llega a ser porque otra vez la pericia del conductor nos llevaba a Valladolid,volvía a coger otros atajos(estos eran para ahorrarse los dos euros de un peaje) por carreteras en la que ya no se circulaba en tiempos de María Castaña.

Bueno ya os iré contando mas cosas porque hay mucho que largar.